Industria lleva desembolsados $16 millones en aportes no reembolsables para que más de 2300 pymes puedan asociarse y ganar competitividad

La titular de la cartera fabril anunció que, en el marco del Programa de Sistemas Productivos Locales, de estímulo a la asociatividad empresarial, el Ministerio de Industria brindó asistencia técnica y económica a 147 grupos asociativos, compuestos por mas de 2300 pymes que involucran más de 11 mil puestos de trabajo.

“El impulso del asociativismo pyme cumple un papel destacado para desarrollar nuevas y más fuertes cadenas de valor, generar empleo de calidad y arraigo en regiones alejadas de centros urbanos para industrializar la ruralidad”, destaco la ministra de Industria, Débora Giorgi.

La funcionaria resaltó que con esta herramienta de estímulo a la asociatividad empresarial, la cartera lleva destinados unos $16 millones de esfuerzo fiscal para asistir técnica y económicamente a 147 grupos asociativos, compuestos por más de 2300 pymes que ocupan a más de 11 mil trabajadores.

”Con esta herramienta hemos desarrollado proyectos que van desde la industrialización de actividades primarias para fortalecer economías regionales, hasta proyectos de alta tecnología y software, fundamentales para seguir insertándonos en el mundo con productos de calidad”, aseguró la ministra, al destacar que sólo durante este año, a través de esta herramienta, se asistió a unos 40 grupos asociativos, que involucran a casi 500 pymes.

Entre los principales sectores y actividades asistidas se encuentran el agregado de valor a las actividades, agroindustria, alimentos, metalmecánico, software y servicios de Información y Madera y Mueble. A estas actividades se suman otras que implican a la bioingeniería, diseño Gráfico, indumentaria y marroquinería, industrias culturales, textil, minería, electrónico y biotecnología.

A su vez, 20 de esos clúster, que contemplan a 20 provincias y representan a 15 sectores productivos, comenzaron a exportar a raíz del trabajo asociativo, colocando su producción en 14 países de la región, además de la Unión Europea y el sudeste asiático.

A través del programa se brinda la asistencia técnica, económica y legal necesaria para la conformación del grupo asociativo, financiando durante un año los honorarios de un gerente que los gestione y se realizan aportes económicos directos, no reembolsables, de hasta $600 mil para inversiones de uso común del grupo; ó hasta $1.5 millones destinados a apoyar proyectos de inversión de Centros de Servicios Industriales y Laboratorios de Investigación, Desarrollo e Innovación en Parques, Áreas u otros aglomerados industriales.

Asociarse para ganar

El Grupo Industrial Chaco (Proinch), constituido por cinco empresas metalmecánicas chaqueñas, desarrolló el primer prototipo de una máquina cosechadora para pequeños y medianos productores con menos de 100 hectáreas que cosechen sus granos fuera de término o que deben esperar a que terminen los grandes sembradíos.

“El apoyo de este programa es muy importante porque a través de la asistencia de los coordinadores y herramientas puntuales pudimos avanzar en la producción de esta máquina cosechadora con tecnología de avanzada que comenzamos a fabricar con el apoyo del INTI y del INTA”, afirmó José Seri, titular de AgroSeri SRL, que junto con las firmas Maipú, Auros SRL, Metalmecánica López e Hijos e Iralof llevan adelante este proyecto.

La cosechadora de granos consume 7 litros de combustible por hectárea, tiene una capacidad de cosecha de 1,5 hectáreas por hora y puede recolectar, en un día de trabajo de 8 horas, 12 toneladas de granos. “Ya tenemos varias máquinas pedidas tanto de productores locales como de empresas extranjeras porque, además de poseer tecnología de avanzada, tiene un costo muy por debajo de las grandes máquinas comerciales”, afirmó el empresario.

Otro ejemplo paradigmático es el cluster CERPatagonia, formado por un consorcio de 5 empresas del sector metalmecánico-petróleo y de automatización, que fue asistido por el programa Sistemas Productivos Locales del Ministerio de Industria con $600 mil para la instalación de una planta para la fabricación de aerogeneradores de 50KW de uso domiciliario.

“Este aerogenerador no se fabrica en América latina; y ahora este producto es de industria nacional”, afirmó Sergio Bustos, referente del grupo asociativo. “Cada equipo puede abastecer a 40 familias, y una de las mayores innovaciones de este desarrollo es que el mantenimiento es casi nulo, justamente por estar ubicado en zonas alejadas de los centros urbanos teniendo un sistema de control (380 o 220 MW) que puede ir conectado al alumbrado público, sin tener que hacer millonarias inversiones para abastecer de energía a zonas rurales”.

Buenos Aires, 8 de diciembre de 2012